Los cuatro países latinoamericanos competían por tres vacantes en el grupo encargado de fortalecer y promocionar el respeto de los derechos humanos en el mundo. En la votación Nicaragua obtuvo 98 votos, mientras que Chile logró 159, Costa Rica, 138 y Perú, 136. Los elegidos ocuparán su puesto por tres años e inciarán su mandato a fines de junio próximo.El intento de Managua por sumarse al cuerpo había sido combatido por asociaciones civiles y defensores de los derechos humanos por considerar que no contaba con un historial en la materia que respaldara ese deseo.
El director ejecutivo de la organización defensora de los derechos humanos UN Watch, Hillel Neuer, afirmó que ese país centroamericano no califica para el cargo y lo ubicó al mismo nivel que Congo y Kuwait. Los tres "sistemáticamente votaron de forma erronónea en las iniciativas de la ONU para promover y proteger los derechos humanos de los otros", aseguró.
Por otro lado, los otros tres candidatos latinoamericanos recibieron desde el primer momento la aprobación por parte de distintas organizaciones pro DDHH.
En total fueron renovados quince puestos libres del Consejo. La elección de los nuevos integrantes, que se hizo mediante voto secreto, se efectuó bajo distribución regional equitativa y un período de rotación.
Los 47 asientos del organismo quedaron repartidos de la siguiente manera: Asia y África lograron 13 puestos cada uno; seis fueron para los europeos orientales; ocho, para los latinoamericanos y caribeños, y siete, para Europa occidental y otros.
El grupo que representa a la región quedó compuesto por Cuba, México y Uruguay hasta 2012; Ecuador y Guatemala hasta 2013; y Chile, Costa Rica y Perú hasta 2014.
Fuente: Infobae
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