Lakhi Kant Dutta, de 45 años, residente del pueblo de Kushkibagh, encontró al animal muerto y se deprimió. La Policía regional informó que el cadáver del sujeto fue encontrado colgado de un árbol.La esposa del fallecido, Kanchan Rani Dutta, reconoció a una diario local que su marido sentía un amor inquebrantable por el animal, y que no pudo soportar su muerte.
Lakhi Kant, según la mujer, solía dormir en el establo y quería al animal como a un ser humano.
La vaca, tradicional animal sagrado en el hinduismo, es además un sustento básico para millones de campesinos en la India, donde la mayoría de la población continúa viviendo en las zonas rurales y en condiciones de pobreza.
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