Ese mismo día, Pintado confirmó la denuncia. Fue al lugar y vio cómo dos empleadas de León entregaban polos, volantes y fósforos con el rostro de la congresista a un grupo de simpatizantes, que debían, a su vez, distribuirlos en sus bases. Ella misma se hizo pasar por una de las activistas y recibió el material proselitista.
La funcionaria elaboró un informe (el N° 005-2011) que elevó al presidente del JEE-Lima Centro, Hugo Molina. Lo natural es que la infracción cometida por Luciana León acarreara una sanción. Pero sucedió lo contrario. No solo se mandó el documento a la congeladora sino que Pintado comenzó a ser hostilizada laboralmente, acusada de una supuesta infracción (faltarle el respeto a un superior) que, a la postre, terminó en su destitución, el martes 22. A León hasta ahora nadie la ha sancionado.
Fuente: Peru21
No hay comentarios:
Publicar un comentario