La historia de los gatos en el parque Kennedy data de 16 años atrás aproximadamente, con unos poco gatos que probablemente al ser abandonados, se acostumbraron a vivir en esta área sin que su presencia sea muy notoria. Con el paso de los años, la población se ha incrementado debido al abandono de estos animales por parte de propietarios irresponsables.
En la actualidad, los gatos sobreviven gracias a la acción de diferentes grupos voluntarios conformados por personas que sin otro interés que la compasión y simpatía por estos animales contribuyen desinteresadamente a su alimentación y cuidado veterinario, sin recibir apoyo de instituciones privadas o públicas. Es importante mencionar que son parte de estos grupos algunos profesionales veterinarios quienes son un ejemplo de vocación al dar apoyo en la esterilización de los gatos, sin lo cual la cantidad de gatos habitantes sería inmanejable.
Son estos voluntarios quienes han detectado estos casos de muertes repentinas de gatos jóvenes y sanos. Se ha confirmado, a traves de necropsias, que estos animales han sido envenenados y han tenido una muerte, lenta, cruel y dolorosa.
A través de esta nota, se busca la atención de las autoridades del distrito, de grupos de defensa de los animales y de la opinión pública para detener estos actos de crueldad extrema. Es cierto que no todos los vecinos simpatizan con la presencia de los gatos en el parque, sin embargo, nada justifica estos actos de crueldad.
Vecinos refieren que en anteriores gobiernos municipales, tuvieron algún tipo de protección que si bien no llegó a ser explícita por lo menos evitó que se dieran estos actos de crueldad y trató de evitar además que se incremente el abandono de gatos cachorros y adultos en este lugar.
Lamentablemente, según lo referido, la actual administración de la municipalidad no ha mostrado interés por evitar estos actos de crueldad humana que suceden a menos de 100 metros del local de la alcadía del distrito.
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